Ra, Dios del Sol


Nombre: | Ra, Atum-Ra |
Rol: | Dios Solar, Dios Principal |
Género: | Masculino |
Representación: | Disco Solar, Ojo de Ra, |
Animales asociados: | Halcón, Escarabajo, |
Hermanos: | Thoth, Serket, Sobek, Apep |
Jeroglífico: | ![]() ![]() |
Ra es el dios egipcio más importante, el principal del panteón. Representaba el inicio de la vida y era el Dios del Sol y del cielo, pero también creador de los conceptos de muerte y resurrección.
Dios Egipcio Ra: Representación
Al dios Ra se le representa con cabeza de halcón y con un disco solar encima de su cabeza. Los faraones egipcios eran considerados de su descendencia.
Otras representaciones:
- Escarabajo. Representa el sol que nace del este a primera hora de la mañana. También podemos ver al escarabajo empujando el disco solar en el firmamento.
- Sol del mediodía, en su máxima exposición, cuando más calienta y más presencia tiene, es otra representación del dios RA.
- Atón. Aparece con la marcha del Sol por el oeste. Representado en forma de anciano encorvado que acompaña a los difuntos en su camino hacia el más allá.
- Halcón. Vinculado al dios Horus, representaba el halcón que iluminada la tierra durante el transcurso de un día.


Dios Egipcio Ra: Orígen e Historia
Cuenta la historia antigua que el dios egipcio Ra nace de un huevo procedente de una gran extensión de agua conocida como Nun. Emerge del océano como un ser de luz, una gran esfera brillante y poderosa. Ra nace y crea el Sol, el viento, la lluvia, la tierra y todos los elementos que existen en ella; así como también la humanidad. Después de eso, Ra adquiere forma humana y se convierte en el primer gobernador de Egipto.
Ra se convierte en el dios de los faraones en el siglo 2400 aC. Durante el transcurso de la dinastía V de Egipto fue considerado un Dios a nivel nacional y más adelante se le vinculó al dios de la creación llamado Amón. Juntos pasaron a ser Amón-Ra, el principal dios del sagrado panteón egipcio.
Mitología
El dios Ra creó la tierra y se unió a los humanos para convivir con ellos durante miles de años. Al principio, los egipcios solo tenían palabras de adoración y agradecimiento por todo lo que Ra había podido crear para ellos, pero el tiempo fue pasando, y al haber tomado una forma humana, el dios Ra fue envejeciendo.
Los humanos empezaron a cambiar la manera de tratar al dios Ra y a verlo como a un humano más, un ser frágil y debilitado por el paso del tiempo. Se reían de él y desobedecían sus leyes. Fue en ese momento cuando la ira de Ra empezó a crecer y el poderoso dios decidió hacer un llamamiento a los otros dioses que había creado.
Creación de Sejmet e inicio de la Guerra
Reunió a su madre Nun, al Dios del viento Shu, a la diosa de la lluvia Tefnut, al dios de la fertilidad Geb y a Nut, la diosa del cielo y las estrellas. Los Dioses escucharon atentamente la situación y propusieron al dios Ra que creara a una diosa de la guerra para que dirigiera un ataque feroz que terminara con todos los hombres. Y así fue como nació Sejmet, diosa de la guerra y la venganza, para generar un brutal ataque contra el hombre, sembrando el miedo y la violencia y atemorizando a toda la región de Egipto.
El Plan de Ra y la transformación de Sejmet
Ra, al ver la feroz y despiadada cacería que había generado a través de su hija, decide apiadarse de los hombres que aún quedan y frenar a Sejmet. Para ello reúne grandes cantidades de cerveza las mezcla con ámbar y las extiende por toda la ciudad. Litros y litros de cerveza que a la luz de la luna adquirían un color rojizo parecido al de la sangre.
La Diosa Sejmet, ante tal panorama, cree haber terminado con todo hombre alzado y lo celebra bebiéndose la falsa sangre, hasta emborracharse por completo de cerveza. Tal fue su estado de embriaguez que ese día no logró matar a ningún hombre.
Más tarde, fue a visitar a su padre Ra y este, satisfecho por los fabulosos resultados de su plan, decidió cambiar su nombre por el de Bastet, para así convertirse en un ser totalmente distinto y ser nombrado como diosa de la dulzura, el amor y la pasión.
Isis y la serpiente
Después de tan sanguinario episodio, el Dios Ra sigue envejeciendo, esta vez, con el respeto que merece. Pero comprende que no le queda demasiado tiempo y que debe dejar su legado a dioses más jóvenes.
Los Dioses Geb y Nut tuvieron varios hijos, y de entre ellos, Isis, una diosa muy lista que quería hacerse con el poder de Ra. Un día, durante un paseo, Ra, fruto de su ancianidad, dejó ir algo de baba que cayó al suelo. Isis la recogió sin ser vista y creó con ella una serpiente. Más tarde la serpiente mordió a Ra y el poderoso Dios fue envenenado. Ante tal dolor, el dios Ra comprendió que le había dañado un ser que él no había creado.
Fin del reinado de RA
Isis aprovechó el momento y le dijo: solo puedo ayudarte si me transfieres tus poderes revelándome tu nombre secreto para poder sanarte. Ra, le transfirió el nombre y con él sus poderes, haciéndole jurar que no se lo diría a nadie más y salvo al hijo que tendría. Un hijo al que debería llamarle Horus. Y Horus debe mantener el secreto de este nombre y este poder con él para siempre.
Aceptada la promesa, Ra transfiere sus poderes a Isis para que pueda curarlo. Sin poder ninguno, el Dios Ra, deja de reinar en Egipto y se retira a los cielos. Un lugar tranquilo en el que pasear siguiendo el recorrido del Sol.
Dios Egipcio Ra: Curiosidades
- El Dios Ra puede tomar la forma corporal que quiera. Se decía que cada amanecer, con cada nuevo día y salida del Sol, Ra emergía del inframundo y otorgaba a la humanidad y a la tierra, un día más de vida y calidez.
- Se creía que viajaba con una barca por el cielo desde Oriente hasta Occidente, un viaje que duraba 24 horas, en el que recorría todo el planeta. Según el momento del viaje, Ra se podía manifestar al amanecer como Jepri, al mediodía como Horajti y por las noches como Atum (representando los últimos rayos del Sol en la línea del horizonte).


3. Tal y como se menciona en la mitología, el nombre de RA, albergaba un gran poder y por eso lo mantuvo en secreto, para que nadie lo nombrara.
El Ojo de Ra 👁
Simbología
En la cultura egipcia el Sol y la Luna representaban los ojos del mundo: el Sol era el ojo derecho y la Luna, el ojo izquierdo. El Ojo de Ra representa el control y el poder. El Ojo le permitía a Ra devolver a la vida. Cuando vemos representaciones del dios egipcio Ra, aparece por encima de la cabeza un disco anaranjado y amarillo que representa el Sol y a la vez el Ojo.
El Ojo de Ra es una representación y símbolo del dios Ra y del Sol. Tanto por su poder procreador, amaneciendo cada mañana para dar vida al mundo, al planeta tierra y a la especie humana. El Ojo de Ra también trae consigo la otra cara de la moneda: el aspecto destructivo de Ra, el Sol que quema, que arde y destruye.


Amuleto
Actualmente podemos ver el Ojo de Ra representado en figuras pequeñas para portar como amuleto, esculpido en joyas o tatuado en la piel. La fuerza de este símbolo y ha perdurado durante miles de años por la creencia popular acerca de su buena suerte. Se usaba antiguamente para ahuyentar evitar las enfermedades y la muerte pero también en el caso de los cadáveres, para evitar su desintegración, una vez embalsamados.


Sincretismos y fusiones entre Dioses
Atum-Ra
La ciudad de Lunu, durante el imperio egipcio, fue un lugar de veneración del dios Ra. Más adelante, durante la civilización griega, esta ciudad fue nombrada y conocida como Heliópolis (ciudad del Sol). Allí reinaba el también dios Solar Atum, por lo que finalmente se fusionó como Atum-Ra.
Amón-Ra
Cuando Ra pasó a ser considerado una deidad nacional (durante la dinastía V) se le vinculó al dios egipcio Amón y juntos se convirtieron en Amón Ra, principal dios del panteón egipcio. La traducción de Amón-Ra significa literalmente "culto al Sol".
Ra-Horus
Horus fue un dios posterior a Ra, venerado en el Antiguo Egipto. Se asocia al dios Ra por su vínculo con la cabeza de halcón.